Amissina Namagere Selemane llega a Alemania en 1980, inicialmente a Altenburgo, en Turingia. La joven de 23 años tiene dos hijos, que deja al cuidado de sus padres en Mozambique. En la RDA se forma como electricista de vehículos de motor en la Empresa de Propiedad Popular (VEB) Planta de lignito Regis y posteriormente vive en Hoyerswerda.

Entrenamiento militar antes del viaje

Amissina Namagere Selemane creció en el norte de Mozambique, en Pemba. Como todos los futuros trabajadores contratados de Mozambique, viaja a la capital de su país, Maputo, donde pasa una instrucción militar de varios meses como preparación para su destino en la RDA. Muchos compañeros sufren mucho con el entrenamiento y algunos son enviados de nuevo a casa porque no pueden cumplir los duros requisitos físicos. «Especialmente para los hombres, este entrenamiento fue muy duro», recuerda. Lo único que sabe es que irá a Alemania y que allí deberá trabajar y aprender. En qué ciudad vivirán y qué profesión aprenderán, los jóvenes no lo saben.

Salida hacia Berlín Oriental

El 20 de octubre de 1980, Amissina Namagere Selemane por primera vez en su vida sube a un avión y vuela hacia la RDA. En su grupo hay 35 hombres y 15 mujeres. De Berlín Oriental se dirige a Altenburgo, en Turingia, donde trabaja en la VEB Planta de lignito Regis hasta 1985. Allí recibe formación como electricista de vehículos de motor. Amissina disfruta trabajando en el taller. Se siente respetada y apoyada en la empresa.

 

Me sentí orgullosa de aprender un oficio de verdad, como los hombres.

Amissina Namagere Selemane, Maputo 2021

Añoranza de la familia

Inmediatamente después de su llegada, los trabajadores contratados son examinados en el hospital de Regis-Breitingen. Durante estos exámenes, Amissina conoce a una enfermera y entabla amistad con ella. Amissina suele pasar los fines de semana con ella y su esposo. “Hay momentos en que la vida es difícil. Entonces Dios te envía ángeles para protegerte”, dice Amissina al recordar la pareja.

Amistad entre naciones en escuelas infantiles

Amissina Namagere Selemane y sus colegas reciben a menudo invitaciones de escuelas y jardines de infancia, pues en nombre de la amistad socialista entre los pueblos, deben hablar a los niños alemanes de Mozambique. Estas visitas son muy divertidas para ella y la sacan de su rutina. También mantiene una buena relación con los hijos de una colega. Pero apenas tiene contacto con sus propios hijos, pues no puede llamar por teléfono y rara vez recibe correo. Amissina intenta llevarse a sus hijos a Alemania, sin embargo, las autoridades mozambiqueñas y alemanas rechazan su solicitud.

Sentía nostalgia de Mozambique. Trabajar con los niños también me ayudó.

Amissina Namagere Selemane, Maputo 2021

Segunda parada: Hoyerswerda

En 1985, se rescinde su contrato de trabajo y Amissina vuela a Mozambique durante unas semanas por primera vez en cuatro años. Cuando se marcha de la RDA, ya está claro que volverá. Su nuevo lugar de trabajo es la región de lignito de los alrededores de Cottbus, en la VEB Planta de lignito Welzow. Ahora vive en una residencia para trabajadores contratados en la calle Clara-Zetkin-Straße de Hoyerswerda.

Allí conoce a su futuro novio Antonio, a partir de ahora tiene pareja. En Hoyerswerda hay muchas parejas mixtas, siempre hombres mozambiqueños y mujeres alemanas. «No sé si los alemanes no tuvieron el valor. Hablaban con nosotros, pero no se acercaban», recuerda.

Junto con los demás compañeros mozambiqueños, suele ir de excursión los fines de semana. Amissina se hace amiga de la fotógrafa Gabriela Nauendorf, quien hace muchas fotos y retratos de trabajadores contratados mozambiqueños en su estudio.

Regreso

En 1988 finaliza el segundo contrato. Amissina Namagere Selemane regresa a Mozambique, en parte porque no quiere perder completamente el contacto con sus hijos. Se libra de los ataques racistas protagonizados por neonazis y ciudadanos alemanes contra la residencia de mozambiqueños en Hoyerswerda en los años 1990 y 1991.

En Mozambique no encuentra trabajo en su profesión y se las arregla con trabajos esporádicos. Como muchos retornados de la RDA, lucha contra la pobreza. Hoy vive con sus nietos en Maputo, Mozambique.

Credits:
Entrevista realizada por Catarina Simão 2021 en Maputo
Texto: Julia Oelkers
Investigación y protocolo de las fotos Catarina Simão, Julia Oelkers

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